La vieja y poco dilucidada pregunta

Si hay una pregunta sin respuesta satisfactoria desde siempre y que todavía tiene vigencia para los músicos de Córdoba es: ¿porque las bandas o solistas de rock de Córdoba nunca alcanzaron notoriedad a nivel nacional e internacional?, entre tantas otras que podrían plantearse.
Bien, intentaré, mediante reflexiones muy sencillas, una respuesta.
Pero antes haré una primera consideración que tiene que ver con lo que denominaré, a los efectos del escrito, realidades comparadas (RC).
Ésta categoría teórica nos servirá para volver mas tangible y discernible el terreno en el que se moverán las reflexiones, de manera tal que, a la hora de opinar ustedes y en el supuesto de entablarse una discusión, estemos munidos de una buena cantidad de elementos objetivos para evitar desgates innecesarios.
La veracidad de las RC será fundamental para legitimar algunos de los argumentos que expondré.
Otro punto que me gustaría tocar, antes de comenzar con mi exposición, tiene que ver con la necesidad de generar un espacio de diálogo donde la pasión, el fanatismo y la subjetividad queden de lado, ya que lo que me mueve a escribir éste ensayo, es generar aportes que a su vez contribuyan a una reflexión y de ser oportuno, porqué no, una autocrítica.
En éste sentido existen tres agentes que conviven en interacción permanente:
a) Por un lado tenemos a los músicos, sujetos activos de la actividad artística que tiene que ver con la corriente estilística del Rock, Pop o la etiqueta que se desee poner a ésta vertiente de música popular.
b) Por el otro tenemos a la prensa que permanentemente siembra ideas o conceptos a través de sus comentarios, notas o crónicas de los espectáculos y que mal haríamos en considerar acéptica o neutra, ya que en la mayoría de los casos (hablamos de los periodistas claro está) se trata de egresados de la Escuela de Ciencias de la Información y que por lo tanto, desde el punto de vista técnico-musical, no poseen una preparación adecuada o específica para expedirse en lo que hace a la sintaxis o el discurso musical. Lo que acabo de expresar no es un juicio de valor, es una realidad. Poseer conocimientos técnicos de música es otra cosa. En todo caso, lo que si suele haber, es un conocimiento de tipo estadístico relacionado con los detalles de la biografía y por lo tanto con la discografía de los artistas involucrados.
c) Por último, tenemos al público que, con su asistencia a los shows y la compra de material discográfico evidentemente moldean una realidad común a todos quienes participamos o estamos interesados en éste fenómeno social y musical.
Hechas éstas aclaraciones pasemos al punto en cuestión.